Podría haber subrayado ese «depende». Y haber escrito como Javier Montes en La vida de hotel: «pronunció la cursiva».
Zazi, la adolescente de esa misma historia, nos da, con la lucidez a la que nos tiene acostumbrados, otra lección de estética. A través de ella Erickson pone el foco en las dificultades que manifiesta quien está en la...
Se verifica, así, que al crítico cultural se le atraganta lo que al narrador le resulta natural. A través de Dotty, la montadora que va a enseñar a Vikar su oficio en Zeroville, Steve Erickson nos muestra cómo el...
También hablaron sobre este asunto María Virginia Jaua y José Luis Brea, según recoge la primera en Idea de la ceniza. El pie se lo dio Los detectives salvajes de Roberto Bolaño. Dice ella: «la primera vez que la leí...
«El pensar, diría Macedonio, es algo que se puede narrar como se narra un viaje o una historia de amor, pero no del mismo modo. Le parece posible que en una novela puedan expresarse pensamientos tan difíciles y de...
En Performance, estrenada ayer en el IVAM, Peio Aguirre despliega en la sala de exposiciones otra serie de personajes, pone en escena su propio teatro psíquico por medio de unos cuerpos que llevan a cabo una conversación coral sobre...
Por su parte, planteada la creación (o la escritura) en términos de teatro psíquico, Alejandro Gándara matizaba en Las puertas de la noche la supuesta soledad del autor por boca de su médico Alfredo Munguía: -¿Te acuerdas de por...
Francis Alÿs sostiene ante Sarah Thornton que los artistas cuentan con el privilegio de la “licencia poética”, cosa que, una vez dada, puede ser difícil de retirar. Y poco después la reportera aborda el tema principal de su investigación....
A propósito de la “estética de pizarra de colegio” de ¿Cómo viven los artistas?, Sarah Thornton confía a su autora, Jennifer Dalton, una anécdota de la que extrae una moraleja reveladora: «John Baldessari me dijo una vez que sólo...
Sarah Thornton recuerda, al hablar de Marina Abramovic, a Tehching Hsieh. «Su obra más conocida es One Year Performance 1980-1981 (Time Clock Piece), que consistió en pegarle un puñetazo a un reloj cada hora, puntualmente, durante 365 días. Cada...
La ¿casualidad? quiso que mientras Ben Lerner veía El reloj y, fruto de su visionado, experimentaba la epifanía que le llevó a dar forma a 10:04 (a pesar de que en la nota final explica que «el tiempo en...
11S, 11M, 15M… Sí, quizá se haya exacerbado esa excitación de la periodización. Puede leerse bien en la Conversación con Manuel Borja-Villel que Marcelo Expósito ha publicado recientemente. Por lo demás, Lerner ya dejaba claro en Saliendo de la...
En su primera novela Ben Lerner visitó el Centro Guerrero. No menciona allí el nombre, pero a qué otro sitio podría referirse el narrador cuando dice que, desde el Albaicín, «bajamos a la ciudad y visitamos la catedral y...
Una diferencia es que donde DeLillo, veinteañero en los sesenta, ante la naturaleza ilusoria de la belleza está más cerca de los que hablan y hablan (como, a su modo, Pynchon), Cuenca Sandoval, que nació en los setenta, propugna...
El jardín escondido le pasó desapercibido al nieto del príncipe Genji y la naturaleza incognoscible quedó preservada. A la inversa, el espectáculo fastuoso de ciertos atardeceres provoca en millones de personas la sensación de lo sublime. Pero no faltarán...
Debemos a László Krasznahorkai la descripción de otra figura del desencuentro. El capítulo XLIII de Al Norte la montaña, al Sur el lago, al Oeste el camino, al Este el río reconstruye con delicadeza y rigor zen la asombrosa...
10:04 es en buena medida una especulación que se deriva de las fantasías sobre los viajes en el tiempo y las paradojas a las que nos abocan. La proximidad de una tormenta devastadora predispone al narrador a vivir experiencias inusuales....