La introducción del movimiento real en el arte del siglo XX no ha hecho sino prolongar una cuestión antigua y fundamental sobre la animación de los artefactos. Presentes en los gabinetes de curiosidades, los autómatas y las máquinas tenían puntos en común con los fetiches, otros objetos-sujetos venidos de países extraeuropeos. Los surrealistas se sirvieron de objetos móviles para interrogar la psicología profunda; los artistas cinético-lumínicos y neoconcretos han creado entornos para testar el ambiente de las grandes ciudades. Si la cibernética ha producido sistemas tecnoartísticos, la robótica actual creadora de androides vuelve a plantear la cuestión del antropomorfismo: ¿por qué queremos que el mundo se nos parezca?
THIERRY DUFRÊNE
Antiguo alumno de la Escuela Normal Superior de Saint-Cloud (1977-1980), Thierry Dufrêne es actualmente profesor de Historia del Arte Contemporáneo en la Universidad Paris Ouest Nanterre. Catedrático de Historia, es miembro del Comité Francés de Historia del Arte, del Consejo Internacional de Filosofía y Ciencias humanas (CIPSH-UNESCO), y desde 2004 secretario científico del Comité Internacional de Historia del Arte (CIHA). Miembro de la AICA (Asociación Internacional de Críticos de Arte), especialista en la Historia de la Escultura Moderna y Contemporánea, ha sido comisario de exposiciones y autor de numerosos libros, artículos y catálogos, como Giacometti, les dimensions de la réalité (1994), Le journal de Giacometti (2007), Cannibalismes disciplinaires. Quand l’histoire de l’art et l’anthropologie se rencontrent (2007) o Dalí (catálogo de la exposición del Centro Pompidou y el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, 2013). Director de redacción de la revista 20/21Cahiers du Centre Pierre Francastel (2008-2014), es miembro del comité de redacción de Perspective (INHA) y del comité editorial de Diogène (UNESCO). Entre 2007 y 2013 fue el encargado de relaciones internacionales del Institut National d’Histoire de l’Art (París).
Deja una respuesta