Hay cierta constante en los grandes eventos culturales, y casi en toda exposición, y es la de que una obra, de manera inesperada, comienza a establecerse como imagen referencial de la exhibición en la prensa. No importa qué nivel de rechazo de lo espectacular observe la muestra, suele ser imposible huir de cierta mirada unívoca de los reporteros gráficos. Sucedió con Ron Mueck en la última Bienal de de Szeeman, con las esculturas de Mark Manders en la Documenta 11 o con la propia lámpara de Joanna Vasconcelos en la Bienal de María Corral-Rosa Martínez. Esta mixtificación, y si no echen un vistazo a las recientes reseñas, parece estar afectando a la Documenta 12, donde la jirafa disecada de un zoo de Palestina de Peter Friedl compite con los movimientos de Trisha Brown o la instalación de las fotografías-archivo de trabajadores de Alan Sekullah en la montaña. Por suerte, esta tendencia, que luego deviene histórica (si no me creen echen un vistazo a este breve estudio), nada tiene que ver con el archivo que los primeros visitantes están subiendo a la red. Así que, para quienes, ante semejante postalismo, estén replanteándose una visita a Kassel, aquí tienen uno de los muchos slideshows que pueden encontrarse en la web:
se agradece el paseo por la doc, me extraña no ver casi nada de arte electrónico….la pintura mediocre, sólo citas de obras modernas, en fin..un saludo. c