Con motivo de la visita de Rafael Argullol al Centro Guerrero el 15 de mayo de 2017, y tomando como punto de partida su concepto de transversalidad, iniciamos una serie de textos en el blog con el nombre de uno de sus últimos libros, Archipiélago (Subsuelo, 2015). En Archipiélago, cincuenta autores del mundo de la cultura elegían un fragmento de la obra de Argullol, un fragmento de la obra de otro autor y una imagen que definieran, de una u otra forma, al pensador catalán. El resultado de esta iniciativa de Oriol Alonso Cano, responsable del libro, no fue en absoluto apologético. Al contrario, la propuesta acabó diciendo más de quienes elegían los fragmentos literarios y las imágenes que del propio Argullol, demostrando así la fertilidad del ejercicio sinérgico que el concepto de transversalidad había generado. Con esta voluntad de indagación, entre el azar y el destino, presentamos nuestra versión transversal de Archipiélago, donde un texto de un escritor y una obra de José Guerrero, como islas con un origen geológico común, ocuparán un mismo espacio para generar un diálogo, expulsarse, acercarse, fundirse o comprenderse mutuamente.
Oriol Alonso Cano es escritor, profesor y articulista en diversos medios de comunicación. Doctor en Filosofía, así como grado en Psicología, ha realizado múltiples estudios y trabajos de investigación que han sido publicados en revistas especializadas y forma parte de diversos proyectos culturales. Es autor de Encarnaciones del capitalismo (Carena, 2014) y Experiencia de ausencia (Anthropos, 2015) y autor y coordinador de la edición de Archipiélago. Retrato polifónico de Rafael Argullol, la obra de la que nace esta sección, motivo por el cual lo hemos elegido para que escoja un cuadro de José Guerrero y un texto propio para presentar, tras el post piloto ya editado, la primera entrega.
GRITO AL SILENCIO
Grita, mi vida, grita
para que te escuchen
los duendes que se esconden
en las entrañas del silencio,
ahí donde las sinuosidades de las ondas
anuncian el silencio perpetuo.
Chilla, cariño, chilla
Rompe con tu estridencia
la sordera del destino,
la ignorancia de los dioses,
las murallas de la fatalidad.
Oriol Alonso Cano
Un feroz cuadro para acompañar un poema arrebatado. Espléndido maridaje.